Coronariografía y angioplastia coronaria


La coronariografía es el cateterismo cardíaco que permite visualizar de forma directa las arterias coronarias, es decir las arterias que llevan la sangre al músculo cardíaco.

A través de una arteria periférica, en la mayor parte de las ocasiones hoy en día a través de la arteria radial de la muñeca, se progresa un catéter  hasta la aorta ascendente y el corazón, y se inyecta selectivamente contraste en las arterias coronarias para visualizar el recorrido de las mismas y descartar enfermedad coronaria. Es el procedimiento de elección en paciente con cardiopatía isquémica como angina de pecho o infarto de miocardio y puede estar indicado también en otro contexto clínico como insuficiencia cardíaca o preoperatorio de una cirugía cardíaca mayor. Permite visualizar también otras estructuras como la aorta o el ventrículo izquierdo.

Una coronariografía diagnóstica, es decir solo para ver las arterias coronarias, es un procedimiento ampliamente utilizado y con un riesgo de complicaciones muy bajo. Como ya comentado, se suelen progresar los catéteres a través de las arterias de la muñeca ya que, aunque de menor calibre que las arterias femorales de la ingle, permiten una recuperación más temprana y un riesgo menor de complicaciones mayores.  En caso de coronariografía diagnóstica, el paciente se puede ir de alta el mismo día del procedimiento.

La angioplastia coronaria es el procedimiento en el que a través de un catéter se dilata una arteria coronaria obstruida y en la mayor parte de las ocasiones se implanta un stent. El procedimiento es parecido a la coronariografía, de hecho podemos decir que es la coronariografía que acaba con una  dilatación de una arteria coronaria obstruida. Se realiza también en la gran mayoría de las ocasiones a través de la arteria radial de la muñeca y permite tratar patologías de extrema gravedad como el infarto agudo de miocardio. El material utilizado y las técnicas son en continua evolución y esto permite por un lado poder tratar pacientes que no tenían tratamiento en el pasado, aumentar la supervivencia en determinadas situaciones y mejorar la calidad de la vida, además de reducir los riesgos de complicaciones relacionadas con el procedimiento y de permitir una recuperación siempre más temprana. 

Comentar ...

Your email address will not be published.

¿Necesitas ayuda?